En el marco del Día de la Educación Especial, que se celebra el 9 de agosto, es necesario destacar el enorme trabajo que realizan las y los docentes para la inclusión educativa de las personas con discapacidad, tarea que atraviesa importantes desafíos ante el contexto de pandemia.
Según un reciente relevamiento del Ministerio de Educación de la Nación sobre la continuidad pedagógica, casi la mitad de las y los docentes de escuelas comunes (44,9%) del nivel educativo primario tienen a cargo alumnos y/o alumnas con alguna discapacidad en proyectos de inclusión. Asimismo, es mayor el porcentaje de estudiantes de escuelas estatales incluidos en este tipo de proyectos respecto a los colegios de gestión privada: 46% y 42% respectivamente.
Otro dato de interés del estudio es el porcentaje correspondiente al ámbito de inclusión ya que en el espacio urbano se registra un 48% contra un 29% del rural.
El relevamiento realizado el año pasado permitió detectar algunos de los principales desafíos y dificultades que se deben superar para una mayor inclusión educativa. Por ejemplo, no todas las escuelas primarias cuentan con Equipos de Orientación Escolar (EOE). Si bien esa ausencia afecta las dinámicas institucionales en general, lo podemos ver reflejado de forma muy particular y marcada en lo que se refiere a la inclusión de niños y niñas con discapacidad.
Entre otras funciones, los EOE tienen a cargo la tarea de realizar seguimientos y elaborar diagnósticos para luego elevar propuestas de proyectos de inclusión con escuelas especiales.
El desfinanciamiento y desarticulación del Plan Conectar Igualdad, registrado durante el gobierno anterior y que fue oportunamente advertido desde el Observatorio de Derechos de Niños, Niñas y Adolescentes de la Defensoría del Pueblo de la provincia de Buenos Aires, también tuvo su impacto en lo que se refiere a inclusión educativa.
El relevamiento ministerial detalla: “La desigualdad en el acceso (a la conectividad) se manifestó como una de las dificultades de base para el trabajo en general y con el estudiantado con discapacidad esto se vio agravado…en algunos casos de discapacidades muy complejas, la falta de presencialidad prácticamente interrumpió la relación entre los equipos docentes y estudiantes, debido a que el apoyo y el vínculo no pudo reconfigurarse en la virtualidad, por estas dificultades en el acceso”.
De acuerdo a equipos directivos entrevistados por la cartera educativa, durante gran parte de las etapas de aislamiento y distanciamiento por el covid-19, las clases se impartieron sobre todo vía Whatsapp (o a través de material impreso en caso de falta de conectividad). También se utilizaron aplicaciones como “google classroom”; “google meet” y “zoom” que carecen de adaptaciones específicas para facilitar el trabajo con estudiantes con discapacidad. En ese sentido, el relevamiento ministerial hizo referencia también a la falta de adaptabilidad de los dispositivos para estudiantes con discapacidades visuales y de otros tipos.
Cabe destacar que, para revertir el desfinanciamiento de los programas de educación e inclusión digital, hubo un relanzamiento del Programa Conectar Igualdad y se sumaron una serie de iniciativas como el Plan Juana Manso que provee programas de conectividad y equipamiento para escuelas públicas de todo el país.
Sobre el Día de la Educación Especial
Fue instaurado para conmemorar la creación de la Dirección de Educación Especial, acontecimiento que tuvo lugar en 1949. En la actualidad, esta modalidad se centra en posibilitar espacios educativos más inclusivos que pongan el énfasis en las capacidades y en el compromiso de todos los actores.
La modalidad de Educación Especial quedó instituida a través de La Ley de Educación Nacional sancionada en 2006. A su vez, el marco normativo bonaerense le asigna la responsabilidad de garantizar la integración de los alumnos con discapacidades, temporales o permanentes, en todos los niveles según las posibilidades de cada persona. También garantiza el derecho a la educación y a recibir atención en todas aquellas problemáticas específicas que no puedan ser abordadas por la educación común, disponiendo para ello propuestas pedagógicas complementarias.